Las “palabras mágicas” abren muchas puertas, pero es algo que siempre cuesta aprender, por lo que esta actividad los ayuda a tenerlas siempre presente, gracias a este hilo de diversas “palabras mágicas” que cuelgan formando una escalera reforzando así a los buenos modales desde pequeños que es algo fundamental. De esta forma comenzamos a los pasos de como se empezaría a formar la actividad: El profesorado que quieran optar por aplicar esta actividad en sus respectivas aulas deberán hacer una lluvia de ideas de “palabras mágicas” que pueden aparecer en esta escalera. Una vez elaborada la lista de palabras, vamos descartando y cogiendo cuales son las que solemos darle más uso y las que más vamos a necesitar. En nuestro caso las palabras a elegir son: buenos días, permiso, por favor, perdón y gracias. Ya elegidas las “palabras mágicas”, nos dirigimos a imprimirlas en el tamaño que creemos considerable y que se puedan ver con clara facilidad. Una vez impresas, nos d...
Hay que hacer una tabla donde se vea el registro semanal del comportamiento del alumno o alumna con TDAH. Según (Barrutia, 2020), la economía de fichas es un sistema conductual que se basa en el uso de contingencias físicas, como por ejemplo, puntos que se darán cada vez que realice las tareas de forma adecuada. Al final de la semana, si consigue al menos la mitad de los puntos, obtendrá dos recompensas. Por un lado, seguir con sus privilegios por ser responsable y mayor y todo lo que ello conlleva y por otro lado, se añadirá un factor motivacional . Es decir, un premio que no tiene por qué ser material. Puede ser hacer algo juntos, que sea él o ella el que escoja algo que le guste u otra recompensa que les motive. De esta manera, el premio que se consiga será un reforzador positivo y demorado para reforzar mucho más las conductas alternativas a trabajar. Tenemos que seleccionar al alumno o alumna a quién va ir enfocado esta economía de fichas, porque en f...
En este caso nos encontramos a un niño en el aula que muestra un trastorno de déficit de atención e hiperactividad. No se integra mucho con los compañeros y el docente debe ayudarlo a combatir ese problema. Este niño presenta a veces acciones como el estar inquieto en el asiento o dar golpecitos a la mesa con las manos o los pies, le cuesta permanecer sentado en el sitio y esta en constante movimiento, tiene problemas para jugar o para. realizar actividades tranquilas, da respuestas apresuradas o interrumpe a quien está hablando, tiene dificultades para esperar su turno... Figura 7. niño con manos en la cabeza <<extraída de pinterest>>
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